Audrey Hepburn

"Para tener unos labios atrayentes, pronuncia palabras afectuosas. Para tener una mirada cariñosa, busca el lado bueno de las personas. Para estar delgada, comparte tu comida con el hambriento. Para tener un pelo precioso, deja que un niño lo acaricie con sus dedos al menos una vez al día. Recuerda, si alguna vez necesitas una mano, la encontrarás al final de tus brazos. Cuando envejezcas descubrirás que tienes dos: una para ayudarte a ti misma y otra para ayudar a los demás. La belleza de una mujer aumenta con el paso del tiempo. La belleza de una mujer no radica en la estética, la verdadera belleza de una mujer es el reflejo de su alma."

miércoles, 9 de febrero de 2011

Un dia cualquiera, mejor dicho, una noche cualquiera...
Todavia tenía el sonido de la música en las orejas, andaba por la calle como si todavia siguiese rodeada de mis amigos, sonriendo y intentando crear glamour.
El sabor de la última noche seguia entre mis labios.
Llegue a mi casa, cansada de tenerme a mi misma en pie, puse el CD, sonaba una canción tan tranquila...
Culpame, porque lo hice, me permiti el lujo de volver a pensar en tus labios en forma de sonrisa, en tus dientes perfectos, en tu voz en mis oidos, en tus brazos mientras me agarrabas por la cintura, me acuerdo del hueco de tu hombro donde dejaba caer mi cabeza, sigo recordando los momentos que jure olvidar, los mejores.
Quise dejarte lejos y enterrarte en una caja de madera preciosa junto con el dolor.
Esa misma noche, lo habia hecho, habia vuelto a ser ella misma, habia reido como solia hacer antes, y gritado las canciones.
Se habia curado de tu enfermedad por ti, lo supo en el momento en el que, en vez de derramar lágrimas, dejo ver una sonrisa, por la belleza de lo ocurrido, empezando a creer que ya no volvería, pero con la esperanza de que lo siguiente fuese mejor.

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